miércoles, 31 de diciembre de 2008

Relatos Urbanos, 2008


Este año no me fue posible acudir al curso de literatura, tuve problemas con mi horario de trabajo, y no pudo ser. Tenía un buen sabor de boca de la pasada edición. Volví a participar con otro cuento. De nuevo tuve suerte y me seleccionaron. Esta vez no hubo premio. No siempre se gana. La edición de este año se llamó Relatos Urbanos, un libro llamado deseo. Mi cuento se tituló Una raya en el camino. Les dejo un extracto:

El miedo era un amigo extraño cuando se sumergió entre los matorrales. Se escapó del aviso con el corazón destrozándole el pecho, las piernas agarrotadas y el aire atrapado en la garganta. Se reía de su mote, el lobo, se reía de la fragilidad de su cuerpo en la huída y de cómo las apariencias encierran una manera de ver y no una certeza. Sentía la burla abrasándole la nuca. Le temblaban las manos aunque no sudaba, siempre lo sintió como una navajada de su cuerpo. Se echó al monte sin escopeta, medio desnudo, con un sombrero de esparto cruzado en la sien y los tropiezos de la prisa arañándole las rodillas. Hacerme esto a mí, maldecía, no tienen vergüenza. Andaba a tientas, la luna se perdía entre las copas de los árboles de solana. Conocía la zona, era pastor, de ahí su mote, nadie tenía tanto ganado. Aterraba verle llevarlo hacia la montaña, la escopeta en la mano, la mirada fiera en un punto indefinido, los dedos sonando la culata. Le gustaba apostar su cuerpo entre ribazos con agujeros de escorpiones y arbustos vencidos de caracoles mientras su ganado rumiaba. Le respetaban, imponía, aunque era fachada, y ahora lo sabían, ahora que el aire no llegaba a sus pulmones y el frío se le clavaba en el alma, ahora lo sabían al verle huir, cuando lo que esperaban era que se liara a cañonazos desde su casa. La cueva no era profunda, tenía un conducto por el que se podía escalar hacia un hueco, el lobo se acurrucó hasta perder el sentido de sus miembros en una posición de feto. Se sentía humillado. No conoció a su padre, le dijeron que llorara, pero aquel agujero al que bajaban la caja no le decía nada, hubo gente que le besó con fuerza, otros le animaron a superarlo, el muerto era un desconocido, no lo recordaba.
© Pedro F. Navarro, 2008
http://www.relatosurbanos.com/2008/index.php
http://www.alicantelibros.com/asp/galerias.asp?id=50

sábado, 27 de diciembre de 2008

Mort Cinder


Mort Cinder. Héctor Germán Oesterheld, Alberto Breccia. Planeta DeAgostini. Col. Trazado. Cartoné. 224 págs. B/N.

¿Está el pasado tan muerto como creemos? Nos interroga Ezra Winston. No hay repuesta. El pasado respira. Mort Cinder se publicó en la revista Misterix de 1962 a 1964. Se cumplen ahora cuarenta y cinco años. Escrita por Héctor G. Oesterheld considerado “el más grande escritor de aventuras”, y, lamentablemente uno de los “desaparecidos” de la dictadura argentina. Dibujada por Alberto Breccia, mago del claroscuro, de la composición y de la narrativa: “el dibujo de Breccia tiene una cuarta dimensión de sugestión que lo aparta de los demás dibujos”. Esta obra está considerada como una de las más importantes de la historieta. Ezra Winston es un anticuario de los de antes: de trastienda de reliquias. Mort Cinder es un ahorcado resucitado, “es el hombre de las mil muertes”, ha vivido en todas las épocas y trabaja para Ezra. Las historias se inician con la aparición de un objeto antiguo. Soñamos con ser parte del pasado, de haber vivido distintas vidas, y, a veces, esa sensación se nos acentúa. Mort Cinder es el reverso de este sueño, las historias que nos cuenta no son realmente transcendentes, la verdadera fascinación es, que sin ser nadie, su historia es la historia que hubiéramos podido protagonizar. Mort Cinder es la conciencia de la humanidad a través del tiempo, con sus errores y aciertos, aunque él representa más los errores. Es, como comentaba el guionista Juan Sasturain, “más un mecanismo que un personaje, siendo todos no es nadie, y sirve de pretexto para enhebrar historias sombrías de amor y muerte”. En 1974 los autores se reunieron, querían continuar Mort Cinder, Oesterheld escribió en un papel unas frases y se las entregó a Breccia. Mas tarde “desapareció”. El final del papel decía: “Mort Cinder es quizá esa vida que quedó incrustada en la materia inerte (nunca diré muerta) de las cosas. Y digo quizá porque ni yo, que viví tanto con él, sabría decir quién es Mort Cinder”. Esta historieta marca a fuego la retina del lector. No la dejen pasar.

© Pedro F. Navarro, 2007

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en octubre 2007)

martes, 23 de diciembre de 2008

Relatos Urbanos, 2007


El año pasado participé en un curso de literatura impartido por Mariano Sánchez Soler y José Luís Ferris. Estas sesiones eran el germen. No conocía el proyecto hasta ese momento. Una editorial alicantina, ECU publicaba un libro de relatos de autores noveles junto a escritores ya consagrados. La participación consistía en entregar un cuento durante la celebración de la Feria del Libro de Alicante. Los mejores serían seleccionados y publicados. Probé. Fui seleccionado. El libro se llamó Relatos Urbanos, reflejos de asfalto. Durante la presentación del libro unos meses después en Noviembre volví a sorprenderme. Se entregaban una serie de galardones a los mejores relatos. No lo sabía. Esa noche recibí aturdido el tercer premio al mejor relato de la antología. El cuento se titulaba Huir. Les dejo un extracto:

Cuando estoy en la orilla del mar, al fondo, hay una fila de barcos mercantes intentando entrar a puerto. Los hay que esperan meses. Difícil es entrar, imposible salir. Siento una tormenta de arena en mis entrañas y el sabor a tierra de mi muerte. No sé vivir cuando el desierto me llama, cuando mis ancestros se revuelven en mis sueños. Mi sexo es virgen. Mi himen no ha sido perforado. Siento rabia: importa más que mi vida. Mi marido vendrá en dos días. Mis padres me entregaran, es la costumbre, la tradición si lo prefieres. La anciana que acompaña a mi esposo mirará los ojos de mi vajina, y dará su bendición. Un himen cosido se nota. Jamás te arriesgues. Hay otras soluciones. Cuando no he podido más me perdía entre matorrales de esparto con el hombre que siempre amé, y al que no podía querer. Suspirábamos, jadeábamos en un silencio de lápida, y le dejaba sodomizarme con una delicadeza de flor en la tierra de noches sin luna del descampado.
© Pedro F. Navarro, 2007
http://www.relatosurbanos.com/2007/index.php
http://www.alicantelibros.com/asp/galerias.asp?id=44

jueves, 18 de diciembre de 2008

Trazo de tiza


Trazo de Tiza. Miguelanxo Prado. Norma Editorial. Cartoné. 92 págs. Color.

Todo empieza como un juego. Un puzzle sin continuidad de solución.
Adolfo Bioy Casares y Jorge Luis Borges han acabado de cenar. Se demoran en una polémica sobre la elaboración de una novela cuyo narrador en primera persona omitiera o no contara con veracidad los hechos incurriendo en contradicciones que permitieran a unos pocos lectores el descubrimiento de una realidad atroz o banal.
Miguelanxo Prado (A Coruña, 1958) parte de esta premisa en Trazo de tiza. Es uno de los autores básicos de la historieta actual española. Trazo de tiza es, quizás, su obra más importante, tanto desde el punto de vista de los premios como de la acogida que tuvo y tiene. Norma Editorial ha realizado la cuarta edición de este trabajo por vez primera en cartoné y con la historieta nueva incluida desde la tercera edición: un sentido homenaje al Corto Maltes de Hugo Pratt.
Una noche de tormenta. Un barco a la deriva. El amanecer, la calma y la llegada a ese pequeño trazo de tiza en la inmensidad del océano. Una isla con un enorme embarcadero, una única casa y un faro estropeado. En la casa, una fonda en realidad, viven Sara y su hijo, en el embarcadero nada más hay otro barco amarrado. Un visitante llegado en cada barco: Ana y Raúl. Gaviotas flotando suspendidas en el aire. Una isla reventada de olas, como dirá Ana, “entre lo tangible y lo posible”. Los tonos pastel recuerdan auroras boreales. Lo real y lo irreal se entremezclan. El juego temporal. La ruptura con la estructura tradicional de narración en historieta: el puzzle irresoluble.
Hay dos claves en la obra de Miguelanxo Prado que se aprecian con fuerza en este trabajo: la primera, la dificultad en la comunicación, los personajes establecen breves encuentros, los diálogos son cortantes, hay una violencia sumergida en las palabras, la segunda, el paso del tiempo que se palpa y saborea de forma magistral en cada viñeta, en cada uno de los siete capítulos ha transcurrido un día completo, vemos como amanece, los personajes comen, atardece, se acuestan. El paso del tiempo es palpable y los personajes están sujetos a él.
En el embarcadero hay un muro de mensajes escritos en diversos idiomas que junto a los demás elementos componen una imagen de desasosiego. Ana escribe en su diario: “El faro, el dique, Sara y su hijo… todos son, tomados por separado, perfectamente banales. Es el conjunto el que resulta inquietante. La isla es un puzzle en el que las piezas encajan por su forma, pero no componen la imagen lógica esperada.” Estas frases son las claves de la obra: su alma.
No me pregunten por el argumento. El autor nos avisa desde el principio. Trazo de tiza es un juego. No piensen con lógica o con racionalidad. No encontraran la solución con ese pensamiento. Vayan más allá del sentido literal de las palabras y las imágenes de esta historieta. La curiosidad es el único mapa válido. La relectura obligatoria. ¿Aceptan el reto?
© Pedro F. Navarro, 2007

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en septiembre 2007)

sábado, 13 de diciembre de 2008

S.


S. Gipi. Ediciones Sinsentido. Rustica. 109 págs. Color.

Imagina una piedra arrojada contra la superficie de un lago. Contra todo pronostico la piedra se hunde con lentitud, las ondas provocadas se dispersan. ¿Lo imaginas? Las ondas son los recuerdos; la piedra al hundirse el tiempo de una vida. Gipi nos lo muestra en su último trabajo: S.
Gian Alfonso Pacinotti, Gipi, nació en Pisa en 1963, comienza a publicar en 1994 en la revista satírica Cuore. Aunque no fue hasta 2002 cuando entró en contacto con la editorial boloñesa Coconino Press, y comenzó a publicar dentro de la revista Black una serie de historietas de un aire irreal y nebuloso que le otorgarían el reconocimiento con la publicación en 2003 de un recopilatorio de éstas donde aparecerían otras inéditas: Exterior Noche. En 2004 saldría Apuntes para una historia de guerra, obra que le consagra a nivel internacional al conseguir el prestigioso premio al Mejor Álbum en el Festival de BD de Angoulême. La revista Lire lo consideró como uno de los veinte mejores libros editados ese año en Francia siendo la única historieta de la lista. Le siguieron Los Inocentes (2005), y las inéditas en nuestro país Questa é la Stanza (2005) y Hanno ritrovato la machina (2006). La novela gráfica S. (2006) es su último trabajo largo.
En S., desde la apariencia de cuaderno de apuntes, late un dolor intenso. Asistimos a un conjunto de recuerdos desordenados, un niño/hombre nos habla de S., su padre, de los días de verano, de la barca, de los recuerdos de la segunda guerra mundial, de sus días finales de vejez, de olores, de sabores, de historias cruzadas, un puzzle donde todo fluye como agua. La memoria es así un fluir de agua en desorden, Gipi atrapa el mecanismo, nos lo muestra: los recuerdos truncados, el ir y venir entre ellos. Nunca una historieta lo ha conseguido. “En cinco minutos de bombardeos son aniquiladas cinco mil personas. S. oye el ruido de los aviones. Oye el silbido. Ve las bombas cayendo” Sin dudas su mejor trabajo, y sí, el más emocionante. Léanlo.

© Pedro F. Navarro, 2007

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en julio 2007)

sábado, 6 de diciembre de 2008

Una noche de tormenta

Un viento negro sopla en la noche mientras la lluvia arrecia y el relámpago pálido camina aterrado entre truenos. El camino desaparece de los pies. Una luz lejana brilla tenue. Exhalas vaho. Sientes tus manos rígidas. La capa de tela gruesa no te aleja de la intemperie. Sientes desnudo tu cuerpo en la inmensidad de la tormenta. Con tus nudillos de cristal golpeas la puerta de madera de una casa desconocida donde has visto el brillo de luz. Es una vela. Ahora lo sabes. Oyes el eco reverberar en la estancia. Golpeas de nuevo. Como el trueno ves los relámpagos sin poderlos atrapar, son difusos, raudos, y al nacer ya han muerto de antemano, son un instante en la oscuridad.
La puerta te abre a la calidez de la estancia. Tu cara se sofoca. Una mujer mayor se apoya en el quicio de la puerta reventada por el sueño. Tu frío muere. Con su cara de letargo te interroga. Hablas de la tormenta, del frío que traspasa tus ropas, de cómo el camino se perdió en la noche, del no saber dónde estás ni cómo has llegado hasta la casa, o de si es páramo, bosque o desolación donde te encuentras.

La mujer es una anciana. Te ayuda a entrar. Le das la capa aterida. Te acomodas en una mesa preparada eternamente para comer. Tomates, cabezas de ajo, aceite, un cuchillo, dos tenedores la adornan. Sólo falta un plato caliente te dices. La mujer lo trae humeante. Miras su cara de preocupación. Es una noche extraña comenta. Te habla del filo de la navaja, de cómo la esperanza se quiebra, y cómo lo bello se vuelve en trastorno. Escuchas un bebé llorar. No, no ha empezado ahora a llorar. Sus lágrimas son huecas. El tiempo está esparcido en su garganta ronca. Lo escuchas y te preguntas cómo no lo habías oído antes. Cosa del frío te dices.
Mientras el humo del plato caliente sacude tu paladar de cueva la mujer mayor ha ido hacia la estancia de donde provienen los lloros. Regresa con el bebé en brazos. No está más tranquilo, sigue llorando. Es hambre, te dice la mujer. El bebé no tiene ni tres horas. Es hijo de la tormenta y la noche. Huérfano, te dice la mujer, nada más nacer. Su madre yace en el cuarto. Un derrame al dar a luz lo ha barruntado todo de sangre. La vida le ha huido. No se ha podido hacer nada. La mujer acerca un trapo blanco mojado de agua y azúcar a los labios del recién nacido. El
bebé lo rechaza.
La mujer te mira triste. Dio a luz con mi ayuda y la de los vecinos. Tras el desenlace hemos intentado que el bebé mame de la madre. No ha querido. En cierta forma lo sabe y llora su pena mezclada con la sensación de hambre que no entiende y que le destroza las entrañas.
La mujer te pregunta quién eres. Vas a dar dos respuestas. No sabes nada más. Ni de ti, ni de tu pasado. Te llamas Naéter. Buscas a tu hija perdida. Lo demás es
un velo cruzado en el recuerdo. La anciana te pregunta si tienes leche. Levantas la vista. Sí, le respondes. Recuerdas a tu hija: con su cintura estrecha, sus ojos de agua, su pelo de sal y una sonrisa sin olvido. Sí, algo más recuerdas. Aunque no lo vas a compartir. Te levantas. Vas hacia la mujer. Dulce, coges al bebé y lo posas en tu regazo. Te vuelves a sentar. Muestras tu blanco pecho. Sólo una condición impones a la mujer mayor. Estás fatigada. Cuidarás al bebé el tiempo que tardes en reponerte. Durante tu estancia nada ni nadie debe molestarte. La mujer accede. Acercas el bebé. Le amamantas. Se alimenta con fruición. Acallas sus lloros. Cierra los ojos. El calor le inunda. Vivirás en la planta baja de la casa de la madre. Está cerca. Arriba vive un niño que nunca sale de casa. Prefiere no hablarte más de él. Insiste en que nadie te molestará mientras cuidas al bebé. Con el alba regresan los vecinos. Cogen el ataúd en sus brazos. Lo sacan de la casa. Lo cargan sobre sus hombros. En la puerta, con el bebé abrigado, miras partir a la pequeña comitiva. Tras una noche de lluvia los colores húmedos son más intensos. El ataúd y los vecinos son una sombra negra recortada contra el horizonte. El bebé duerme en tu regazo. Sueña sueños. Lo abrazas con fuerza contra tu pecho. Cierras los ojos. Sueñas sueño. Tu hija perdida: con su cintura estrecha, sus ojos de agua, su pelo de sal y una sonrisa sin olvido.
© Pedro F. Navarro,2006

(Este cuento fue 1º Premio en el X Certamen Provincial de Narrativa Géminis en noviembre de 2006)
Diario Información 14-11.06

domingo, 30 de noviembre de 2008

La casita de chocolate

El pasado 20 de Mayo de 2008 en el Centro Municipal de las Artes de Alicante colaboré en la presentación del libro La casita de chocolate escrito por Jacob y Wilhelm Grimm e ilustrado por Pablo Auladell. Fue una tarde agradable en un acto organizado con sabiduría y amor hacia los libros. Durante mi intervención hablé de la trayectoria del ilustrador y de las impresiones que el libro me produjo. Les dejo un extracto:

Hänsel y Gretel es uno de los cuentos más reconocidos y reconocibles de los hermanos Grimm. Un universo cotidiano de nuestra infancia, de nuestras primeras lecturas. Además de ser un cuento desgarrador y de una sinceridad que desarma.
El trabajo de Pablo Auladell en este libro nos devuelve un cuento nuevo. Distinto. Siendo el mismo texto las sensaciones son novedosas. El nivel de exigencia gráfico, la cuidada elección de color y gradaciones, el diseño de la página, el dibujo, a veces pétreo, nos devuelve un cuento con una mirada turbia entre jirones de esperanza, esperanza representada por un gato blanco, la luna o un pajarillo que canta. Sobrevolamos miradas oscuras, miradas de ojos rojos, miradas enmascaradas. Estamos rodeados por cuervos, o urracas de negro pelaje y más oscura amenaza. Todo envuelto por un ambiente malsano donde parece no haber luz de sol, aunque sí luz de luna. Símbolos.
Un hallazgo es la recreación de la bruja. Ese aspecto de pájaro, de cuervo o urraca, que enlaza directamente con los pájaros que han supuesto la perdida del camino de regreso a casa de nuestros héroes. Otro hallazgo es el plano secuencia narrativo empleado por el autor para mostrarnos la acción, y que a veces, uno tiene la sensación extraña que remite a las pinturas negras de Goya.
La lectura me ha embargado, me ha transportado, uno tan leído, o eso cree, lo último que espera es la sorpresa. La casita de chocolate de Pablo Auladell editado por Kalandraka será uno de esos libros que no se olvidan, será uno de esos libros que quedan prendidos en el alma. Ya no imagino una Gretel o un Hänsel de otra manera. Esto nos habla claramente del nivel de exigencia que Pablo se ha auto impuesto, no buscando la recreación de un universo ya transitado, sino la creación por medio de elementos no sospechados de una coherencia gráfica que hacen de este trabajo una verdadera recreación del mito. No conozco mayor alabanza.
Un último apunte ¿no les parece que todos los tonos de color elegidos en este libro recuerdan todos los colores posibles del chocolate?
© Pedro F. Navarro,2008


http://www.kalandraka.com/blog/?p=150
http://pedrovillar.blogspot.com/2008/05/kalandraka-presenta-en-alicante-la.html

martes, 25 de noviembre de 2008

Maus


Maus. Art Spiegelman. Random House Mondadori-Reservoir Books. Tapa dura. 296 págs. B/N.

¡Al fin! ¡Se acaba de publicar la edición definitiva de Maus por Random House Mondadori! Estamos de enhorabuena. Art Spiegelman nació en Estocolmo en 1948. Emigró a Estados Unidos donde creció y se educó. Fue ilustrador hasta el inicio de la década de los setenta donde comenzó a interesarse por la historieta. En aquellos trabajos iniciales dentro del underground vemos a un artista usar el medio con un interés por aprehenderlo. Más tarde, en 1980, junto a su mujer Françoise Mouly funda la revista Raw llamada a convertirse con los años en un referente de la historieta para adultos con trabajos maduros fuera de género y con una fuerte carga de experimentación. Maus se publicó en Raw entre los años 1980-1991. Actualmente Art es dibujante, colaborador y editor adjunto de la exclusiva revista New Yorker. Maus narra la historia de Vladek Spiegelman un polaco judío superviviente de los campos de exterminio nazis. Art, su hijo, desea dar a conocer su historia para dejar testimonio de la persecución y genocidio de millones de judíos. “Esas historias no interesan a nadie” le responderá su padre. Art con su libreta y su grabadora perseverará comenzando un viaje por su memoria y sus recuerdos que le llevará desde un pequeño pueblo polaco, Sosnowiec, hasta Auschwitz. Maus narra/encarna la lucha por vivir. Jamás se pensó en un medio como la historieta para contar una historia de estas características. Obra excepcional considerada un clásico desde su publicación, utiliza todos los recursos narrativos posibles creando otros originales. Spiegelman animaliza a sus personajes: los judíos son ratones, los nazis gatos; es una iconografía propia que acentúa el dramatismo. Dice Umberto Eco: “Maus es un libro que no se puede dejar de leer, ni siquiera para ir a dormir. Cuando los ratones hablan de amor, te conmueven; cuando sufren, lloras”. La innovación de este trabajo marcó un punto y aparte en la novela gráfica actual, un hito, por todo ello, es la primera y única historieta que ha ganado el prestigioso Premio Pulitzer.

© Pedro F. Navarro, 2007

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en junio 2007)

sábado, 22 de noviembre de 2008

Pablo Auladell. Bibliografía. Ilustración IV

Con los libros ilustrados aparecidos en 2008 doy por finalizado el repaso a la bibliografía de Pablo Auladell. Cada año confeccionaré una entrada con sus trabajos. Espero que os haya gustado.

2008 La casita de chocolate. Jacob y Wilhelm Grimm. Col. Libros para soñar. Sevilla. Kalandraka Ediciones.



2008 El sueño de Pablo. Antonio Ventura. Madrid. Los cuatro azules.





2008 Zaragoza. Benito Pérez Galdós (Adaptación de Luis Suñén). Zaragoza.
Editorial Luis Vives. Edelvives.




2008 Adivinancero antológico español. José Luis Gárfer, Concha Fernandez. Madrid. Anaya.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Pablo Auladell. Bibliografía. Ilustración III

Continuamos con la bibliografía de Pablo.

2006 Cuentos al amor de la sal. Ángeles Cáceres. Elda, Alicante. Salazones Serrano.




2006 El Cantar de Mío Cid. Anónimo (Adaptación de Vicente Muñoz Puelles). Col. Adarga, vol.:3. Zaragoza. Editorial Luis Vives. Edelvives.




2006 Piel de oso y otros cuentos. Jacob y Wilhelm Grimm. Cuentos completos, vol.: III. Madrid. Anaya.





2006 Le rêve de Pablo. Antonio Ventura. Genève. Editions La Joie de Lire.





2007 Amor y pedagogía. Miguel de Unamuno. Col. Clásicos Hipánicos, vol.:26. Ediciones Vicens Vives.




2007 Isis. Silvina Ocampo. Roma. Oreccchio Acerbo (Lampi).






2007 Lo único que queda es el amor. Agustín Fernández Paz. Madrid. Anaya.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Bardín el Superrealista


Bardín el Superrealista. Max. Editorial La Cúpula. Álbum cartoné. 84 págs. Color.

Arrasó. Dejándonos sin habla. Corría el rumor. Sería la noche de Max. Y lo fue.
Hace unos días se celebró el XXV Saló Internacional del Cómic de Barcelona, como todos los años se realiza una entrega de premios destacando lo mejor del año. Bardín el Superrealista se alzó con todos los galardones a los que optaba: Mejor Guión, Mejor Dibujo y Mejor Obra. Es la primera vez en estos veinticinco años de salón que una obra obtiene tres premios. Max volvió a subir a recoger un cuarto galardón, Mejor Revista, que obtuvo la publicación de historietas de vanguardia de la que es co-director y fundador: NSLM.
Max (Francesc Capdevila, Barcelona, 1956) se inicia en la historieta desde el movimiento underground barcelonés de la década de los setenta. Se vincula en 1979 y desde sus orígenes a la revista El Víbora, de la cual es colaborador asiduo y mensual y donde desarrollará el grueso de su producción de historieta. Ha escrito y dibujado desde entonces dieciséis álbumes obteniendo reconocimientos nacionales e internacionales como el premio Ignatz (EEUU, 1999) y el Gran Premio del Saló Internacional del Cómic de Barcelona (2000), desde la década de los ochenta ha trabajado como ilustrador obteniendo en este campo entre otros reconocimientos el Premio Nacional de Ilustración Infantil y Juvenil en 1997.
Bardín es un tipo normal. Un día asoma su cabeza a otra dimensión, la superreal, que está por encima de la nuestra y allí un perro andaluz, personaje repudiado por Dalí y Buñuel en su famoso corto, le otorga unos poderes. A partir de entonces lo mismo cambia de dimensión por apetencia, que se enzarza en disquisiciones teológicas con dioses o escribe manifiestos de barra de bar entre coñac y coñac. Bardín es un tipo corriente y el mundo superreal es un mundo de ojos y horizonte. Bardín es una obra personal y original que engrandece al medio y a su autor, uno de los artistas indiscutibles en el panorama de la historieta. Felicidades Max.

© Pedro F. Navarro, 2007

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en abril 2007)

domingo, 2 de noviembre de 2008

Pablo Auladell. Bibliografía. Ilustración II

Sin lugar a dudas 2005 fue el año más prolífico para Pablo.

2005 Caracol. Pablo Albo. Col. Tren azul, vol.:63. Barcelona. Edebé.




2005 Dulcinea y el caballero dormido. Gustavo Martín Garzo. Zaragoza. Editorial Luis Vives. Edelvives.



2005 Dulcinea y el caballero dormido. Gustavo Martín Garzo. Col. Ala Delta, Serie verde, vol.: 47. Zaragoza. Editorial Luis Vives. Edelvives.




2005 El espantapájaros. Pablo Albo. Col. Colas de sirena, vol.:24. Barcelona. Ed. La Galera.



2005 La cova del torrent. Pere Pons. Col. Vaixell de vapor vermell, vol.:131. Barcelona. Cruïlla.





2005 Un radiante silencio. Agustín Fernández Paz. No venial. Madrid. Anaya.





2006 Un radiante silencio. Agustín Fernández Paz. Col. Espacio de la lectura, vol.: 6. Madrid. Anaya.

jueves, 30 de octubre de 2008

Mi abuelo Simón lo sabe


El pasado 9 de Febrero de 2008 colaboré en la presentación del libro Mi abuelo Simón lo sabe escrito por Nieves Pérez Rivero e ilustrado por Miguel Ángel Díez que tuvo lugar en el Teatro Wagner de Aspe. Les dejó un extracto de aquella presentación:

Miradas

Voy a hablarles ahora de un aspecto de los dibujos de Miguel Ángel. Las miradas. Los personajes que dibuja nos miran. Es una sensación orgánica. Verán. Voy a ir pasando unas imágenes donde podrán comprobarlo. Es uno de los ejes del dibujo de este autor: las miradas. Son miradas que nos interrogan desde el papel. Miradas vacías, miradas llenas, miradas de color, miradas blancas. Son miradas que nos desnudan, que otorgan vida a los personajes plasmados por Miguel. Es uno de los rasgos más importantes de su dibujo. Imprime fuerza y raza a sus trabajos. Además de ser una de las huellas básicas de su estilo. Ahora les pregunto ¿Hacia dónde miran los dibujos? Les contesto: hacia el lector.
Sus dibujos entran rápidamente en comunicación con el lector. Son dibujos que no se olvidan, quedan grabados a fuego en la retina, en el imaginario de esa persona. Díganme ¿Cuándo unas ilustraciones nos han mirado con esa sinceridad con esa humanidad? Sensaciones. Acaban por quedarse con nosotros. Acaban por no ser meros dibujos. Son personas. Con las que hemos compartido tiempo y vivencias. Con las que hemos reído, llorado. Es lo importante. No nos han dado igual. No son dibujos planos o sinsentido. No señores. Nos hemos dejado llevar por sus preocupaciones, por sus alegrías, hemos caminado de su mano, hemos conocido su historia. Y volveremos. Volveremos a leer esos libros. Volveremos a abrir esas páginas. Volveremos. Y, cuando lo hagamos, cuando regresemos a esas páginas la mirada de esos personajes quizás nos pregunten ¿Has vuelto?
© Pedro F. Navarro,2008


http://redacom.alacantexpress.com/docs/14/09-2-2008%20Presentaci%C3%B3n%20libro%20Mi%20abuelo%20Sim%C3%B3n%20lo%20sabe.pdf

http://pedrovillar.blogspot.com/2008/02/mi-abuelo-simn-lo-sabe-presentado-en.html

domingo, 26 de octubre de 2008

Pablo Auladell. Bibliografía. Ilustración I

Seguimos con la publicación de la bibliografía de Pablo Auladell. Ahora el turno es para los libros que ha ilustrado.


2000 Cuentos contados. Pablo Pérez y Felix Calatayud, Albo. Col. Literatura Juvenil, Ciudad Real, Ñaque.




2000 Literatura infantil en la escuela. Ramón F. Llorens. Alicante. Universidad de Alicante, Caja de Ahorros del Mediterráneo.


2000 Literatura infantil y lectura en el fin de siglo (1898-1998). Ramón F. Llorens. Alicante. Universidad de Alicante, Caja de Ahorros del Mediterráneo.

2002 Cuentos populares españoles. Antonio Rodriguez Almodóvar. Col. Libro Regalo. Madrid. Anaya; Colectiva.




2003 Mar de sábanas. Pablo Pérez. Los álbumes de sopa de libros. Madrid. Anaya.




2004 El bosque de los sueños. Antonio Rodriguez Almodóvar. Col. Libro Regalo. Madrid. Anaya; Colectiva.




2004 El cementerio del capitán Nemo. Miquel Rayó. Col. Ala Delta, Serie verde, vol.: 42. Zaragoza. Editorial Luis Vives. Edelvives.




2004 Peiter, Peter y Peer y otros cuentos. Hans Christian Andersen. Cuentos completos, vol.: IV. Madrid. Anaya.

jueves, 23 de octubre de 2008

Poesía Ilustrada


El pasado 29 de marzo del año 2007 realicé la presentación de la mesa redonda Poesía Ilustrada donde moderé un coloquio a cargo del ilustrador Miguel Calatayud y del escritor Pedro Villar. La presentación fue acompañada de la proyección de imágenes del libro El bosque de mi abecedario, además de otras, como las del libro Federico García Lorca para niños y niñas... y otros seres curiosos. Ocurrió en el Teatro Wagner de Aspe.
Con esta mesa volví a realizar de nuevo presentaciones.
Les dejo un extracto.

Miguel Calatayud:
Sus trabajos son juegos visuales, son imágenes que nos sacuden, que nos comunican, que entablan un diálogo con el lector, con el espectador, que abarcan mundos, que nos hacen dudar de la realidad, ya que nos la muestra unida a lo fantástico, a lo irreal, y nos oculta la frontera, y nos produce inquietud el no poder separar lo empírico de lo onírico, como si el mundo de los sueños y la vigilia se hubieran unido.

Pedro Villar:
Es un mago de las palabras, en sus versos, en sus poemas, consigue que muchas de ellas, difíciles de domar, de colocar en frases, de conseguir que tengan un ritmo se amolden a sus exigencias, y se posan dóciles en sus versos, y hasta nos hacen parecer que están alegres como si tras años de mal colocarse hubieran conseguido encontrar su lugar.

http://pedrovillar.blogspot.com/2007/03/poesa-ilustrada-en-aspe.html

martes, 21 de octubre de 2008

V de vendetta


V de Vendetta. Alan Moore y David Lloyd. Planeta DeAgostini Cómics. Álbum. 304 págs. Color.

El aclamado guionista Alan Moore y el dibujante David Lloyd realizaron con V de Vendetta una de las obras de historieta más importantes en el panorama internacional. Inicialmente publicada en cortas entregas en blanco y negro dentro de la cabecera inglesa Warrior (Warrior nº 1-16 y 18-26, marzo de 1982 a febrero de 1985) fue interrumpida hasta el éxito de la obra magna de su guionista: Wachtmen. La editorial DC Cómics propuso a Alan Moore continuar su obra inacabada. Pese a las reticencias con la editorial que le llevarían a abandonarla posteriormente, accedió debido a la oportunidad que se le presentaba de poder finalizarla. DC Cómics publicaría entre septiembre de 1988 y marzo de 1989 la obra completa en diez entregas adaptándola al férreo formato de comic-book, añadiéndole color además de 84 ilustraciones a página completa. Años más tarde acabaría publicándose en formato álbum, su forma definitiva y más adecuada.
La historia está ambientada en una Inglaterra de un futuro no lejano donde el país se ha transformado en un estado totalitario. El personaje V emerge como una suerte de alegoría del anarquismo. Concepto que deviene en manos del guionista en un trabajo de una gran profundidad. Dividida en tres partes “la primera presenta al personaje y su mundo, la segunda explora los personajes secundarios en mayor profundidad y se centra en su mayor parte en Evey Hammond, y la tercera titulada El País de Jauja conduce todos estos fragmentos disparatados hasta […] un clímax satisfactorio”. Las tramas secundarias están engarzadas con maestría, el hilo conductor, destruido, nos hace vagar por historias tan cegadoras como la de Valerie. Alan Moore siempre fue consciente de que un individuo aislado es incapaz de destruir el poder de un Estado: el resultado de su acción siempre será el fracaso. La tesis del guionista, pese a no anular al individuo, acaba coincidiendo con George Orwell y su antiutópico libro 1984.
Léanla, no se arrepentirán.

© Pedro F. Navarro, 2006

(Columna Noveno Arte publicada originalmente en el periódico 30 Días en diciembre 2006)

domingo, 19 de octubre de 2008

Pablo Auladell. Bibliografía. Monografías de Cómic

En diversas entradas pondré sobre este blog una bibliografía de la obra de Pablo Auladell. Iniciamos este recorrido con las monografías de cómic.

2001 Plagio de encantes. Ed. Sin sentido. Col. Sinfuturo, vol.: 3. Madrid; Colectiva.





2001 El camino del titiritero. Edicions de Ponent. Col. Solysombra, vol.: 8. Onil (Alicante).





2002 El corazón de las tinieblas. Ed. Sin sentido. Col. Sinfuturo, vol.: 4. Madrid; Colectiva (Adaptación al cómic de la novela homónima de Joseph Conrad sobre guiones de Karym Taylhardat).




2003 Tapa roja. Ed. Sin sentido. Col. Sinfuturo, vol.: 6. Madrid; Colectiva. (Adaptación al cómic de un poéma de Jesús Cuadrado).




2005 La torre blanca (Libro de los veranos). Edicions de Ponent. Col. Crepúsculo, vol.:8. Onil (Alicante).




2005 Lanza en astillero (El caballero Don Quijote y otras sus tristes figuras). Junta de Castilla La Mancha. Madrid; Colectiva (Adaptación de diversos capítulos de la obra Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes).



2008 Soy mi sueño. Edicions de Ponent. Col. Mercat, vol.: 26. Onil (Alicante). Sobre guión de Felipe Hernández Cava.